Trabajo seleccionado para XVIII Encuentro de la Red Iberoamericana de Valoración y Gestión de Cementerios Patrimoniales.

Los cementerios patrimoniales son verdaderos museos al aire libre y como tales, son parte de nuestra cultura y de nuestra identidad. Es posible de esta forma visualizarlos como espacios culturales que reflejan costumbres, y en especial formas de sentir la muerte. De ahí la importancia de sensibilizar a la sociedad acerca de la conservación y revalorización de éstos.

El sendero Sensible es un recorrido por el cementerio central de la ciudad de Salto (1853). A través del mismo,  en este recorrido nos maravillamos con fastuosas construcciones funerarias que expresan y reflejan un sentir de la muerte en una sociedad disciplinada (1860-1945) .

Dichas esculturas son de autores famosos como Giovani del Vecchio, Ghigli y Vanelli, Edmundo Pratti, José Luis Zorrilla de San Martín, Giácomo Lena, Edmundo Pratti y otros. . Obras confeccionadas en mármoles de carrara, en su mayoría encargadas por catálogo y traídas desde Italia.

Se trató de embellecer la muerte, dignificarla para negar la podredumbre del cuerpo y también de mantener y mostrar las diferencias sociales incluso después de la muerte.

Son 9 panteones dentro del casco antiguo o central con iconografías cristianas y algunas masónicas.

En los panteones se reflejan los valores éticos, morales, filosóficos y religiosos de una sociedad, enmarcada en una época. Trascender más allá dela muerte fue la intención. Y la iconografía utilizada refleja ese sentir y hay un proceso de construcción simbólico  de la realidad a través de distintos mecanismos de Trasmisión cultural.

Por Licenciada Patricia Laines Martínez.