LOS NUEVOS ABUELOS

Saludables y activos, siguen trabajando, van al gimnasio, tienen una alimentación saludable, juegan al fútbol con sus nietos y hasta se conectan a internet. El viejito canoso y encorvado es cosa del pasado: los abuelos 2.0 disfrutan a pleno de esta etapa de la vida y juegan un rol preponderante en la crianza de sus nietos.

Aquel estereotipo del abuelo pasivo que vivía de anécdotas de su pasado, ha dado paso a un nuevo modelo que cuida su aspecto personal, realiza actividades de ocio y diversión y están actualizados en las últimas tendencias informáticas. La edad también juega un rol esencial ya que, en la actualidad, los abuelos tienen entre 55 y 75 años.

En este sentido, el modelo del abuelo tradicional es hoy el bisabuelo. Hoy en día el ser abuelo no es sinónimo de ser un “oráculo: se trata de una figura más cercana y amigable que no solo enseña sino que recibe gustosamente información e interactúa fluidamente con sus nietos, realizando incluso muchas actividades en conjunto.

Las prioridades de la “Tercera Edad” también han cambiados: las generaciones anteriores, se ocupaban de la crianza de los niños mientras sus padres trabajaban, o bien hasta vivían en la misma casa en la actualidad en algunos casos- este modelo tiende a decaer (aunque hay casos en los cuales la realidad es dramáticamente diferente, ver recuadro).

Ahora, los abuelos tiene una profesión activa o bien poseen una serie de actividades por lo cual ya no pasan el día entero en su hogar ni en la plaza con las palomas… y no se encuentran a disposición permanente y continua de sus hijos.

LOS CIBERABUELOS

Una de las razones principales para la ”modernización” de los adultos mayores es Internet. Un estudio llevado a cabo por el portal de ofertas ClubOferting asevera que, cerca del 41% de los mayores de 60 años se consideran “activos en Internet”. Y con activos no se refieren a realizar búsquedas en Google: este segmento de la población tampoco tiene miedo a realizar compras on-line y no dudan a la hora de reservar sus vacaciones, comprar entradas para el cine o el teatro e incluso adquirir gadgets recomendados por sus nietos.  

Los seniors son mucho más osados a la hora de sentarse frente al ordenador de lo que inicialmente se podría pensar. Así, cerca de un 30% de los encuestados participan activamente en redes sociales, blogs e incluso foros.

Pero no todos los usuarios responden al mismo perfil. Así, el estudio clasifica a los Abuelos 2.0 en tres categorías: el ‘usuario elemental’ (que representa a un 30% de los encuestados), el ‘cibercomprador incipiente’ (a un 41%) y, por último, en el nivel más avanzado, el ‘abuelo puntocom’ (un 29% de los encuestados).

En cuanto al perfil típico del cyberabuelo: es varón, con estudios superiores y residente en ciudades de más de 100.000 habitantes. El acceso a Internet de este sector de la población ha sido motivado por factores diferentes, pero el más común ha sido la curiosidad: la mayor parte de estos usuarios sintió que la Red podría resultarles interesantes para “curiosear” o bien obtener información sobre los temas que les interesan.

Otro tópico que derriba el informe es la idea extendida de que la gran mayoría de los más mayores acceden a Internet ayudados por sus hijos. El estudio deja claro que el grueso de estos usuarios ha aprendido a usar Internet de una forma autodidacta y sin ayuda de nadie.

EL AMOR DESPUÉS DEL AMOR

Un reciente estudio reveló que, contra todo prejuicio, los adultos mayores están teniendo una vida sexual activa. El mismo estudio indica que a mayor frecuencia, mejor salud. Comúnmente la gente piense que al superar la barrera de los 60, hay que olvidarse del sexo y vivir los últimos años tratando de compartir otros placeres con la pareja.

Pero una reciente encuesta hecha en los Estados Unidos arroja por tierra estas creencias y saca a la luz resultados que han sorprendido. La investigación fue realizada por reconocidos científicos y publicada en el New England Journal of Medicine, y termina con la idea de que la búsqueda de placer físico solamente es de jóvenes.Para este estudio, investigadores del Proyecto nacional de vida social, salud y envejecimiento, Nshap, de la Universidad de Chicago entrevistaron en sus hogares a 3,005 adultos estadounidenses (1,550 mujeres y 1,455 hombres).

Se trata de la primera encuesta nacional completa de actitudes, conductas y problemas sexuales de los adultos estadounidenses mayores de 57 años, la cual revela que a esa edad muchos continúan teniendo relaciones sexuales con frecuencia. De hecho, la periodicidad de la actividad sexual disminuyó solo ligeramente entre los 50 y los 60.

Algunos de los resultados que se conocieron, revelan otra realidad a la hora de hacer el amor en adultos mayores. Más de la mitad de las personas del grupo de mayor edad, entre los 75 y los 85 que se encontraban sexualmente activos, informó tener relaciones sexuales al menos dos o tres veces al mes, mientras que el 23% informó tener relaciones sexuales al menos una vez a la semana.

Se observó, además, que la disminución del deseo sexual y de las relaciones obedecía más a los problemas de salud o a la falta de un compañero, especialmente en el caso de las mujeres. La encuesta revela que “Los hombres en general son más propensos a tener parejas a una edad avanzada y son más propensos a ser sexualmente activos con sus parejas”.

 ¿ADIÓS A LA VEJEZ?

Las enfermedades que funcionaban como indicadores de vejez ya no lo son de la misma manera ya que muchas son enfermedades crónicas que pueden ser tratadas o prevenidas.

La edad desempeña cada vez más una función referencial menos estricta para la determinación del “ingreso a la vejez”, influida además por las distintas configuraciones culturales: los límites de la vejez se vuelven cada vez más difusos.

Por lo tanto, la consideración de la vejez como una etapa de pasividad o actividad, de clausura o de comienzo, o de belleza y potencial son construcciones sociales, no naturales.

Gracias al crecimiento de la dimensión de este segmento es probable que surja una nueva percepción de la vejez que extienda también los significados de juventud, vitalidad y salud. Los “nuevos viejos” o el denominado “senior group” en otros países, apunta a vivir casi “una segunda juventud”, disfrutando de buena salud, una mayor solidez económica (ya alejados de las presiones de la crianza de los hijos) y la tranquilidad para desarrollar algún hobby, emprendimiento o viaje, anteriormente vedados por otras responsabilidades (siempre refiriéndonos a los niveles socioeconómicos medio y alto).

Estos nuevos “seniors” se convirtieron en una nueva categoría de consumidor mucho más activa que los adultos mayores de generaciones anteriores, con quienes no se ven identificados.

Los adultos mayores de hoy día perciben, en gran medida, que la sociedad tiene una idea equivocada acerca de lo que es el envejecimiento, y no se consideran personas poco productivas, despreocupadas por su aspecto físico, alejadas de la vida social ni incapaces de realizar actividades vinculadas con la juventud como, por ejemplo, disfrutar de su sexualidad. El cambio de percepción hacia los mayores que estamos atravesando ha llevado a que se desarrolle una amplia gama de productos y servicios orientados a seguir tensionando estos límites entre cada una de las etapas.

En primer lugar, se pueden destacar aquellos destinados a extender la juventud y plenitud (y evitar la vejez casi como si fuera una enfermedad) como tratamientos de belleza en los que se destacan las cremas antiage, los tratamientos integrales en spas o centros de belleza y las cirugías estéticas (que han presentado un gran aumento en la generación de los baby boomers).

Pero entre las mayores preocupaciones de los seniors se encuentra la del deterioro físico y la pérdida de la capacidad de valerse por sí mismos. Por esa razón, muchos se vuelcan a realizar actividades y consumir productos y servicios destinados a mejorar su calidad de vida y el bienestar de sus cuerpos.

Actividades como el yoga, el reiki y el taichi se han vuelto muy populares, así como las dietas antioxidantes y alimentos prebióticos, los cuales ayudan a combatir males asociados con la edad tales como el colesterol, la baja en las defensas, etc. Asimismo, comienzan a aparecer opciones para mantener ágil y activa a la mente. Un ejemplo de ello son los videojuegos desarrollados específicamente para las personas mayores, los cuales permiten prevenir o, por lo menos, retrasar la senilidad y la arteriosclerosis.

El ejemplo más famoso es el “Brain Training del Dr. Kawashima”, un paquete de juegos de ingenio y habilidad mental lanzado por Nintendo para su consola portátil DS, el cual evalúa mediante una serie de ejercicios la edad mental del jugador, y le luego le ofrece actividades que le permiten agilizar sus capacidades.

A su vez proliferan los cursos y espacios educativos dirigidos a personas mayores, quienes se vuelcan cada vez con mayor frecuencia a estudiar idiomas y capacitarse en diversas áreas de interés

¿LOS NUEVOS PADRES?

 Es innegable que, para la gran mayoría de las familias, la figura del abuelo y de la abuela es muy relevante. Son el pilar de la familia y representan el maravilloso vínculo que nos une al resto de nuestros congéneres. Sin embargo, no todos los abuelos y abuelas llevan una vida relajada, como se merecen. Un reciente Estudio revela que más de la mitad de los abuelos españoles cuidan de sus nietos todos los días y que se sienten actualmente desbordados por la responsabilidad. ‘’Abuelos y abuelas para todo: Percepciones sobre la educación y el cuidado de los niños’’, es un Estudio sociológico profundo en torno a la importancia de la figura del abuelo en una sociedad donde la familia nuclear se ha visto desestructurada y desbordada por el poquísimo tiempo del que disponen los papás para estar con sus hijos. Entre los “hallazgos” del estudio realizado en España se cuentan las siguientes conclusiones:

 » Más de un 50% de los abuelos/ as cuidan a sus nietos casi todos los días.’’

 » El 22% cuida diariamente a nietos más de 7 horas. ’’ » El 45% cuida a los nietos casi todas las semanas. ’’

 » Los abuelos comienzan a atender a los nietos con más frecuencia que las abuelas, pero las abuelas los cuidan más tiempo